jueves, 25 de julio de 2024


YA DE pequeña lo vi: los hombres quieren casarse con monjas pero se enamoran de putas. Quieren mujeres estables pero les atraen las locas, las curvas, las empoderadas, las que tienen más energía. Cuando cuarenta o cincuenta años después les llega el cansancio existencial o las primeras intermitencias de su polla, empiezan a valorar de verdad a las monjas, con las que están pero no se enamoran.