Los últimos daños del romanticismo. ¿De dónde procede la teoría insensata según la cual las máquinas jamás llegarían a reproducir la creatividad de un cerebro humano porque en nosotros hay un nosequé de misterioso de inexplicable de intransferible? Del romanticismo y su teoría del genio, naturalmente, del ser creador visto como algo inalcanzable y en estado permanente de ocurrencia. Si hubieran tenido una teoría de la originalidad como la de los escritores antiguos, que no tenían reparo en copiar o imitar a los maestros, pues consideraban que el arte es un palimpsesto y sabían que hasta detrás de la máxima creatividad se ve el andamio, nunca habrían cometido ese error.
