domingo, 16 de marzo de 2025


¡NO ME lo creo! El País saca hoy un editorial en el que arremete contra las naciones, los subrayados son míos:
Europa sufre la mayor ofensiva de su historia desde la derrota del nazismo. Grandes potencias y fuerzas políticas —desde fuera y desde dentro— se proponen terminar con el proyecto europeo y, con él, con el espacio de paz, libertad y prosperidad conocido por las actuales generaciones. Vladímir Putin y Donald Trump y las extremas derechas necesitan una Europa dividida en viejas y débiles naciones. Los dos primeros, para tratarlas por separado y desde una posición de superioridad. Los extremismos soberanistas del continente, para alcanzar el poder con la bandera de la nación pura y homogénea, hostil a los inmigrantes y enfrentada a sus vecinos, en una regresión al pasado totalitario que condujo a la guerra y al genocidio.
Lo que deberían hacer ustedes, señores de El País, si de verdad tienen algún amor por lo europeo, es precisamente hacer un diario de tal nombre; un diario que, si bien partiera de una preocupación prioritaria por lo nacional en lo que a lo nacional afecta, debería tener una preocupación prioritaria por Europa y por el mundo en aquellos campos que trascienden lo español. ¿Cómo es eso de que en sus páginas los descubrimientos mundiales sobre el cáncer o el alzheimer siempre los hacen españoles? ¿Cómo es que sacaron ustedes una colección de los treinta mejores poetas en español del siglo XX y diecinueve de ellos eran españoles, habiendo surgido tantos y tan buenos en América? ¿Cómo no les da vergüenza a ustedes titular, cada vez que cae un avión por ejemplo en Surinam, con “Ningún español entre los 342 fallecidos tras estrellarse un Boeing 747 en Surinam”? ¿Cómo era eso de que “la vacuna que va a acabar con el COVID en el planeta” iba a ser española, como ustedes vendieron hasta el ridículo? ¡Como si nos importara un bledo, a aquellos que no somos nacionalistas, en qué país surgía la vacuna, con tal de que surgiera!

Ya existen diarios como los que pido, por fortuna, y somos muchos los europeos no británicos que leemos The Guardian o la BBC, por ejemplo. Pregúntense ustedes, ya que les ha salido ahora la vena del continente, por qué los españoles son los únicos europeos que leen El País.