lunes, 30 de junio de 2025


BARDOT ES un estudio tan pequeño que me bastaron quince minutos para reconocerlo; mis gatos en cambio llevan 48 horas oliéndolo, desmenuzándolo centímetro a centímetro, y siguen encontrándole novedad a todo. A Lorca parece que le gusta bastante; pero Broma era reacio hasta que por la noche, sorpresa, cagó en el nuevo arenero de sílice. No penséis que la primera cagada es tan fácil; a veces los gatos no reconocen la casa nueva y tienden a orinar o defecar en cualquier rincón, sobre todo si tu arenero es de esos con tapa, sin la arena a la vista. Pero si finalmente lo hacen es que ya no están tan nerviosos y comienzan a aceptar el nuevo hogar :)