LA ÚLTIMA consecuencia de Michael Jordan – El legado de Jordan, que se manifestó desde el principio con hijos igualmente atléticos y chupones, Iverson, Bryant, Wade, Carter, McGrady, ha sido tan devastador que ha condenado al baloncesto estadounidense a producir clones que saltan mucho y son expertos en mates, crossovers y trash-talk. La consecuencia es que los últimos siete MVPs de Liga Regular no han sido estadounidenses, caso único en la historia de la NBA, y que la gente relaciona el modo de jugar coral de un Jokic o un Doncic con "escuela europea", al punto de que el ex presidente de Dallas Mavericks, Marc Cuban, llegó a decir que la solución estribaba en enviar a los jóvenes estadounidenses a Eslovenia "para que aprendan a jugar al baloncesto". Sin embargo, hace cuarenta años, antes de que llegara Michael Jordan, los Jokics y los Doncics nacían en USA: Robertson, Bird, Magic Johnson.