LO VARADA que estoy en el mundo. A veces, cuando voy al parque, me da por escuchar a la gente (no porque yo quiera, sino porque los madrileños hablan a grito pelado), y descubro que todo lo que a ellos les interesa, la familia, la tele, el Madrid o el Barça o el Atleti, la comunión de Felipe, las vacaciones en Benidorm, el pueblo que tienen en Zamora..., a mí no me interesa. Tampoco la jubilación que le va a quedar a zutano o mengano, o sobre lo bien que se come en el restaurante Pili o Juancar... Diréis que yo necesitaría encontrarme a gente que guste de los libros, pero tampoco, porque a mí no me gustan los libros que lee la gente, yo no leo a autores que estén vivos o que sean de mi país, que encima no es mi país, lo que me reduce más el interés por el otro, la sensación de hallarme en el centro del océano...