EL SEGUNDO programa de Youtube lo dedicaré a merodear en la figura de Albert Camus, que desde el principio me pareció semejante a Bogart o más guapo y que luego he confirmado que tenía la misma imantación que un actor de Hollywood, facultad sorprendente en un escritor moralista. Escribe Hazel Rowley en Sartre y Beauvoir:
A Sartre le gustó Camus enseguida, igual que a todos los miembros del clan Sartre. Camus era un hombre del Mediterráneo, cálido y apasionado. Tenía ascendencia española, francesa y argelina, y hablaba francés con acento del sur. Era sensible, divertido, extrovertido y sabía muchas historias picantes. Tenía un encanto extraordinario. "Había que verle en una fiesta —recuerda su editor Robert Gallimard—. Mirabas alrededor y de pronto te dabas cuenta de que practicamente todas las mujeres estaban rodeando a Camus".